En los últimos años, la digitalización y la globalización han revolucionado nuestra forma de trabajar, y la arquitectura no ha escapado a este cambio.
Después, con la llegada de la pandemia, el trabajo remoto pasó de ser una práctica poco común a convertirse en norma para muchas empresas. Esto aceleró aún más el cambio hacia un entorno laboral cada vez más flexible.
En el siguiente artículo abordaremos el futuro del trabajo para nosotros, los arquitectos.
Esta es nuestra particular visión de todo lo que está por venir.
↓ Tendencias actuales en el teletrabajo
Cada vez más empresas y estudios de arquitectura reconocen los beneficios de la flexibilidad laboral e incluyen el trabajo remoto como parte de su ADN.
Esto desafía la idea tradicional de que los arquitectos necesitan estar físicamente presentes en la oficina o el lugar de trabajo, demostrando que el trabajo remoto puede ser igual de efectivo, o incluso más, para ciertas tareas.
En la era actual de globalización, ya no estamos limitados a colaborar con los que están más cerca de nosotros; ahora tenemos la opción de trabajar con los mejores, sin importar su ubicación.
Además, en las fases de construcción y obra que tradicionalmente requerían mayor presencialidad, están surgiendo técnicas de supervisión y dirección remota gracias a la introducción de drones y técnicas de documentación audiovisual a distancia.
↓ Ventajas y desafíos del teletrabajo en arquitectura
Más flexibilidad, ahorro de tiempo en los desplazamientos, posibilidad de trabajar desde cualquier lugar… Las ventajas del teletrabajo están muy claras.
Sin embargo, también existen desafíos, especialmente a la hora de coordinar un equipo en torno a un proyecto o encontrar el equilibrio entre trabajo y vida personal. A veces trabajar en el mismo sitio en el que vives no es tan bonito como lo pintan.
Teniendo esto en cuenta, muchas empresas de arquitectura están optando por modelos híbridos de presencialidad y teletrabajo, que ofrecen flexibilidad y al mismo tiempo recuperan la calidez del contacto físico.
↓ Herramientas y tecnología clave para el teletrabajo en arquitectura
Existen muchas herramientas que facilitan el teletrabajo en la arquitectura.
Por ejemplo, la tecnología de diseño sincronizado de Revit permite a varias personas trabajar sobre un mismo modelo y contemplar los cambios en vivo. Además, es muy común el uso de herramientas de gestión de proyectos como Notion, Trello y Asana, así como plataformas de mensajería como Slack y soluciones de almacenamiento y compartición de archivos en la nube, como Google Drive.
↓ El papel de la inteligencia artificial y la realidad virtual
Es un hecho: el papel de la inteligencia artificial está adquiriendo cada vez más relevancia en nuestro sector (y en la vida en general).
La inteligencia artificial puede ser de gran ayuda en tareas como el diseño conceptual y la optimización de diseños. Por otro lado, la realidad virtual puede utilizarse para presentaciones de diseño y recorridos virtuales que ofrecen una mayor comprensión de los proyectos y agilizan la toma de decisiones de los clientes.
Sin duda, ambas tecnologías se han convertido en un diferencial muy atractivo que mejora la calidad y la experiencia en la industria de la arquitectura. Pretender negarlas no es una opción y cuanto antes las incorporemos a nuestro trabajo, antes podremos aprovechar su potencial y destacar en el mercado.
↓ Consejos para la transición al teletrabajo en arquitectura
Si estás pensando iniciar la transición al teletrabajo en tu estudio, te recomendamos:
Evalúa tu set de software: asegúrate de tener las herramientas adecuadas para la producción de proyectos. Si necesitas actualizar o adquirir nuevos programas que faciliten el trabajo remoto, hazlo.
Adopta herramientas de comunicación y colaboración: utiliza plataformas de mensajería instantánea, videoconferencias y herramientas de gestión de proyectos para facilitar la comunicación y que no echéis en falta la distancia física.
Dedica tiempo a definir responsabilidades: esto les dará a todos los miembros del equipo un sentido de propósito y claridad sobre qué se espera de ellos.
Establece reuniones periódicas: te ayudarán a revisar el progreso, resolver problemas y asegurarte de que todas las personas están alineadas en sus roles. Además, aprovecha estas reuniones para tener conversaciones informales y explorar cómo se sienten los miembros del equipo.
Fija objetivos y calendarios de forma clara: trabajar por objetivos promueve la productividad y es vital para mantener a todo el equipo “en la misma página”.
↓ Conclusión
A medida que la tecnología y las herramientas de trabajo avancen, cada vez más profesionales de la arquitectura verán con buenos ojos la adopción del trabajo remoto y exigirán esta metodología de trabajo para decidir sumarse a un equipo.
Igualmente, esto marcará la diferencia entre las empresas y los estudios que abordan los desafíos del trabajo remoto con éxito de las que no lo consiguen. La colaboración efectiva y la gestión del tiempo, serán clave en este nuevo entorno de trabajo.
¿Estás preparado?